top of page
Buscar

¿Cuándo fue la última vez que te preguntaste: “Qué necesito yo?


ree
"El cuerpo grita lo que el alma calla.Y a veces, solo hace falta una pregunta para empezar a escucharlo."

Muchísimas mujeres como tú y como yo —madres, profesionales, cuidadoras— nos hemos pasado años respondiendo al mundo.

🌀 A lo urgente.

🌀 A las demandas de fuera.

🌀 A las expectativas invisibles que llevamos tatuadas en el sistema nervioso.


Y en ese modo automático de supervivencia, dejamos de preguntarnos:

“¿Qué necesito yo?”

¿Por qué es tan importante esta pregunta?


Desde la PsicoNeuroInmunoEndocrinología, sabemos que cada vez que ignoras una necesidad emocional, tu cuerpo entra en alerta sutil:


  • El sistema límbico interpreta esa omisión como estrés

  • El eje HHA (hipotálamo-hipófisis-adrenal) se activa

  • Aumenta el cortisol basal, incluso sin estímulo físico

  • Se cronifica el estado de hiperalerta de bajo grado

  • Y eso repercute en tu inmunidad, tu digestión, tu ciclo hormonal, tu sueño y tu ánimo


    No cuidarte no solo te agota emocionalmente. También tiene consecuencias físicas reales.


¿Y qué hacemos muchas veces?

Reaccionamos con más exigencia:

✅ "Tengo que organizarme mejor"

✅ "Tengo que ser más disciplinada con mi autocuidado"

✅ "Tengo que hacerlo todo bien"

Cuando en realidad, lo que tu cuerpo te está pidiendo no es una nueva rutina. Es escucha, es presencia, es espacio interno.


Técnica de mindfulness: “La pausa consciente para volver a ti”

Este ejercicio es una adaptación de prácticas de mindfulness corporal y regulación autonómica, validado por la práctica clínica y estudios en PNIe, para activar el sistema nervioso parasimpático y disminuir el tono simpático crónico.


Duración: 10-15 min

Paso a paso:

  1. Encuentra tu espacio seguro. Un rincón tranquilo. No necesitas música ni velas (a menos que te guste). Solo tú, sin juicio.

  2. Actitud de bienvenida. Coloca una mano en el pecho y otra en el abdomen. Siéntelas. Agradécelas por acompañarte cada día, sin descanso.

  3. Respira en 4-6-8Inhala en 4 tiempos por la nariz. Mantén el aire en 6 tiempos. Exhala lentamente por la boca en 8 tiempos. Repite 5 veces

    Esto activa el nervio vago, estimula el sistema parasimpático y reduce cortisol.

  4. Escáner corporal con palabras clave. Recorre mentalmente tu cuerpo desde los pies hasta la cabeza. En cada zona, repite mentalmente:

    • “Estoy aquí”

    • “Puedo estar en paz”

    • “Nada que hacer, solo sentir”

  5. Haz la gran pregunta. Pregúntate suavemente, como si hablaras con una niña pequeña:“¿Qué necesitas tú hoy? ”“Qué sería amable contigo ahora mismo? ”Espera. No busques una respuesta intelectual. Escucha tu cuerpo, tus emociones, tu respiración.

  6. Recoge tu respuesta (si surge)Puede venir una palabra, un color, un gesto, una lágrima. Agradece lo que venga. No fuerces. Solo estar ya es un regalo.

  7. Frase de cierre: “Estoy aquí para mí. Me reconozco, me escucho, me acompaño.”

Tips adicionales para integrar esta práctica

  • Hazla por la mañana, antes de que el mundo te arrastre

  • O por la noche, como un ritual de cierre del día

  • No busques hacerla “perfecta”: cada vez será diferente

  • Si no puedes hacer 10 minutos, haz 3. Pero hazlos de verdad.


Si esta práctica te tocó…Cada semana, envío a mi comunidad una pregunta medicinal si quieres como ésta, junto con reflexiones, propuestas de autocuidado y recordatorios suaves de que tú también mereces volver a ti.

🎁 Apúntate gratis → mi newsletter


Frase del día:

“La verdadera medicina no siempre está en lo que haces,sino en cómo te escuchas mientras lo haces.”

 
 
 

Comentarios


bottom of page